Desde que tengo memoria, mi tía Yesenia estuvo obsesionada con la fotografía. Precisamente, con su formato impreso. Menos que artística, su inquietud era de orden práctico: respondía al […]
Desde que tengo memoria, mi tía Yesenia estuvo obsesionada con la fotografía. Precisamente, con su formato impreso. Menos que artística, su inquietud era de orden práctico: respondía al […]